Los precios mundiales del petróleo experimentaron un aumento de casi un 4% el lunes, impulsados por las crecientes hostilidades entre Israel y grupos armados palestinos, lo que ha generado preocupaciones sobre la estabilidad en Medio Oriente.
Los futuros del Brent, el crudo de referencia internacional, aumentaron un 3,7% llegando a los 87,77 dólares por barril a las 13:00 GMT. Mientras tanto, el crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) se cotizaba por encima de los 86 dólares por barril, un incremento de casi el 4%. Ambos índices de referencia experimentaron aumentos de más del 5% al inicio de la sesión.
Este repunte en los precios del petróleo revirtió la caída más significativa registrada desde marzo, ocurrida la semana pasada, cuando el Brent disminuyó alrededor del 11% y el WTI retrocedió más del 8%, debido a preocupaciones sobre la demanda global.
El conflicto actual comenzó el sábado pasado, cuando grupos armados palestinos llevaron a cabo un ataque sorpresa en múltiples ubicaciones a lo largo de la frontera de Gaza, lo que provocó una respuesta por parte de Israel.
Los funcionarios israelíes han informado que más de 700 personas han muerto en el ataque de Hamás, con más de 2,200 heridos y 100 secuestrados, incluyendo ciudadanos de países europeos y Estados Unidos. Según las autoridades palestinas, más de 400 personas han perdido la vida y alrededor de 2,200 han resultado heridas en Gaza después de los ataques aéreos de represalia de Israel.
A pesar de que Israel no es uno de los principales productores o exportadores de petróleo a nivel mundial, la escalada de las tensiones relacionadas con este conflicto de larga data podría aumentar la incertidumbre en la región de Medio Oriente.
Además, existe la preocupación de que las hostilidades puedan dar lugar a sanciones más severas a las exportaciones de petróleo iraní si se sospecha que Teherán está respaldando a Hamás.
Adicionalmente, se espera que estos últimos acontecimientos tengan un impacto negativo en los esfuerzos de Estados Unidos para negociar un acuerdo entre Arabia Saudita e Israel, lo que podría afectar la disposición del reino saudita de aumentar la producción de petróleo.
El pasado viernes, funcionarios sauditas aparentemente comunicaron a Estados Unidos su disposición a aumentar la producción de petróleo en 2024 como parte de un acuerdo propuesto por Israel. Arabia Saudita y Rusia habían acordado previamente una reducción voluntaria combinada de 1,3 millones de barriles por día hasta finales del presente año.
