El Gobierno alemán anunció un plan para reintroducir el servicio militar obligatorio a partir de 2026, en un esfuerzo por fortalecer su defensa ante las crecientes tensiones geopolíticas. El ministro de Defensa, Boris Pistorius, confirmó que el programa, suspendido en 2011, se reactivará para garantizar un ejército “preparado para cualquier escenario”. La medida responde a las advertencias de la OTAN sobre posibles conflictos en Europa y a la necesidad de modernizar las Fuerzas Armadas alemanas.
El servicio obligatorio, que será de un año, incluirá a hombres y mujeres de 18 años, con opciones para cumplirlo en el ámbito militar o en servicios civiles, como la asistencia en hospitales o la protección civil. Pistorius destacó que el objetivo es reclutar al menos 15,000 efectivos adicionales en los próximos cinco años. La propuesta ha generado debate: mientras algunos sectores apoyan la medida como necesaria para la seguridad nacional, otros la critican, argumentando que podría desincentivar la participación voluntaria.
Organizaciones juveniles han expresado preocupación por el impacto en los planes educativos y laborales de los jóvenes. El Gobierno asegura que se implementarán incentivos, como beneficios educativos, para mitigar estas inquietudes. La decisión final será debatida en el Parlamento en los próximos meses.
