Las marcas automovilísticas Volkswagen y Audi han recurrido a asociarse con marcas chinas como XPeng y SAIC para desarrollar nuevos vehículos eléctricos utilizando la tecnología de estas últimas. Este movimiento ha generado interrogantes sobre la industria automotriz de Alemania y su posición en el mercado de los coches eléctricos, ya que dos referentes globales como Volkswagen y Audi buscan soluciones en China. El Grupo Volkswagen anunció que los coches eléctricos desarrollados junto a XPeng complementarán la cartera de productos MEB y estarán disponibles en China a partir de 2026. Por otro lado, Audi profundizará su alianza con SAIC Motor para ingresar al mercado chino en un segmento en el que aún no tiene presencia destacada.
Este giro hacia China no es sorprendente, ya que Volkswagen ha enfrentado retrasos en sus desarrollos, especialmente en materia de software. Las falencias en la plataforma MEB han causado demoras en el lanzamiento de nuevos modelos eléctricos y han llevado a pérdidas de cuota de mercado en China. La búsqueda de ayuda en empresas chinas como XPeng se relaciona con su avanzado software de asistencias a la conducción, que se asemeja al Autopilot de Tesla. Además, Volkswagen pagará a XPeng por sus servicios de tecnología a partir de 2024, reflejando cómo el escenario está cambiando para los líderes tradicionales de la industria automotriz.
Audi también se une a la tendencia al aliarse con SAIC Motor para acelerar la electrificación de su catálogo de coches en China. La competencia con fabricantes chinos en el mercado europeo se ha vuelto feroz, con automotrices como MG4, propiedad de SAIC Motor, ganando popularidad en países como España. Ante esta situación, el Grupo Volkswagen busca asegurar su éxito en el mercado de los coches eléctricos y considera a China como una pieza fundamental para lograrlo.
