Argentina se enfrenta a un pago millonario a un fondo buitre por el caso de la nacionalización de la petrolera YPF en 2012. El juicio concluyó en un tribunal de Nueva York, determinando que el Estado argentino debe compensar al fondo de capital de riesgo Burford Capital. El monto exacto aún no está definido, pero se propone un pago de 4.200 millones de dólares. El fondo buitre adquirió el litigio de los accionistas minoritarios de YPF contra Argentina después de que este nacionalizara el 51% de las acciones de la compañía española Repsol sin una oferta pública de adquisición formal.
El economista Hernán Lechter acusa a los fondos buitres de llevar adelante un esquema de especulación, aprovechando su capacidad para elegir jurisdicciones favorables y obtener sentencias acordes a sus intereses. La jueza Loretta Preska deberá determinar la fecha de expropiación de YPF, lo cual afecta directamente al monto de indemnización. Argentina propone una tasa de interés del 0%, mientras que Burford reclama el 8%. Según el fallo, el monto a pagar podría variar entre 4.900 y 16.000 millones de dólares.
Lechter advierte que cualquier monto a pagar sería problemático para Argentina, dada su situación económica y escasez de divisas. Sin embargo, señala que el impacto sería relativo debido a la importancia estratégica de YPF y su papel en el desarrollo de Vaca Muerta, un yacimiento de hidrocarburos clave para la política económica del país. A pesar de ello, critica la sentencia por aplicar legislación estadounidense en lugar de la legislación argentina y considera que las prácticas de los fondos buitres deberían ser condenadas a nivel global.
