En el marco de la primera quincena de julio de 2023, el presidente Andrés Manuel López Obrador resaltó los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que indican una reducción en la inflación general anual en México, situándose en 4.79 por ciento. Esta cifra representa una disminución significativa en comparación con el mismo período del año anterior, donde la inflación quincenal fue de 0.43 % y la anual alcanzó un 8.16 por ciento.
En una conferencia de prensa matutina, el mandatario enfatizó que esta noticia es motivo de celebración, ya que implica un fortalecimiento de la economía popular y un aumento en el poder adquisitivo de la población. Asimismo, destacó la importancia de mantener una estabilidad económica que beneficie a la mayoría de los ciudadanos, garantizando empleo, salarios adecuados y controlando la carestía para evitar aumentos en los precios de los alimentos, gasolinas y pasajes, aspectos fundamentales para la calidad de vida de los mexicanos.
El presidente López Obrador también resaltó diversos factores positivos que contribuyen al crecimiento económico del país, entre ellos el aumento del salario de los trabajadores, el incremento de la inversión social a través de los Programas para el Bienestar, que llegan a 25 millones de hogares con una inversión anual de 600 mil millones de pesos, así como la recepción de remesas que ascienden a 60 mil millones de dólares al año. Además, subrayó la estabilidad del peso frente al dólar como un elemento clave en la consolidación de la economía mexicana.
En cuanto a la privatización de los servicios, el presidente reafirmó su postura en contra, asegurando que no se contempla su regreso a la vida pública de México. Enfatizó que el gobierno está comprometido en garantizar el acceso a servicios esenciales como la salud y la educación para todos los ciudadanos, y no permitirá que estas áreas sean privatizadas en detrimento del bienestar de la población.
Con estos datos alentadores, el país sigue avanzando en su camino hacia una economía más estable y equitativa, asegurando que los beneficios lleguen a la mayoría de la población y se promueva el bienestar social. El gobierno continuará trabajando para mantener este rumbo y garantizar el acceso a servicios fundamentales que mejoren la calidad de vida de los mexicanos.
