Los miembros del BRICS acordaron seguir presionando por un multilateralismo inclusivo al tiempo que expresaron su preocupación por las “medidas coercitivas unilaterales” que ejercen presión sobre las economías emergentes, según una declaración conjunta publicada el miércoles en su 15ª cumbre anual, celebrada en Sudáfrica.
La histórica reunión de Johannesburgo presagiaba una nueva era para los BRICS. Al grupo, que anteriormente comprendía Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, se unieron otros seis países, entre ellos Argentina, Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos.
En un amplio documento de 26 páginas, los líderes de los BRICS reafirmaron su compromiso con el respeto mutuo, la igualdad soberana, la solidaridad, la democracia y la inclusión, al tiempo que se comprometieron a promover el “desarrollo sostenible y el crecimiento inclusivo ”.
Según la declaración, los miembros también expresaron “preocupación por el uso de medidas coercitivas unilaterales” – aparentemente refiriéndose a sanciones – que, según dijeron, son “incompatibles con los principios de la Carta de las Naciones Unidas” ya que producen efectos negativos, particularmente en las naciones en desarrollo. .
En las últimas décadas, los países occidentales han recurrido cada vez más a las sanciones para presionar a numerosos Estados en un intento por cambiar sus políticas exterior e interior, sobre todo a Rusia por el conflicto de Ucrania. Rusia ha condenado repetidamente las restricciones, calificándolas de ilegales.
Al mismo tiempo, el documento destacó que los BRICS apoyan las “aspiraciones legítimas de los países emergentes y en desarrollo de África, Asia y América Latina, incluidos Brasil, India y Sudáfrica, de desempeñar un papel más importante en los asuntos internacionales”.
Los líderes de la organización también reafirmaron su compromiso con la resolución pacífica de los conflictos en todo el mundo, incluidas las hostilidades en Ucrania, y acogieron con agrado las propuestas de mediación destinadas a desactivar el enfrentamiento.
Respecto a otros temas de la agenda internacional, el documento destacó el compromiso de los BRICS con la resolución pacífica de la cuestión nuclear iraní y la no proliferación de armas nucleares. Además, los miembros condenaron inequívocamente el terrorismo y se comprometieron a combatirlo en todas sus formas.
Al comentar sobre el trabajo de la declaración conjunta, el presidente ruso Vladimir Putin admitió que el proceso de debatir todos los detalles «no fue fácil», al tiempo que elogió a su homólogo sudafricano Cyril Ramaphosa por su «notable destreza diplomática» para ayudar a armonizar el acuerdo. .
El grupo económico BRICS, formado originalmente en 2009, se ha presentado como una alternativa a las instituciones internacionales dominadas por Occidente. Incluso antes de su reciente expansión, representaba más del 40% de la población total de la Tierra y una cuarta parte del PIB mundial.
