Una destacada agencia de las Naciones Unidas anunció el viernes la exitosa culminación de la operación para extraer aproximadamente un millón de barriles de petróleo de un buque deteriorado, el Safer, que se encontraba amarrado frente a las costas de Yemen en el Mar Rojo. La operación, supervisada por el Programa de Desarrollo de la ONU y su administrador, Achim Steiner, logró evitar un potencial desastre catastrófico.
El buque Safer, que había permanecido anclado en la región durante más de tres décadas, había sido motivo de preocupación por su deterioro y riesgo de ruptura o explosión, lo que tendría graves consecuencias humanitarias y ambientales para la zona costera del Mar Rojo. Su falta de mantenimiento desde el inicio de la Guerra Civil de Yemen en 2014 había aumentado los temores.
Steiner señaló que la operación se llevó a cabo con un alto grado de preparación para la mitigación de riesgos y que la agencia recaudó más de $120 millones para financiarla. Además de la extracción del petróleo, se adquirió un segundo barco para transferir el combustible y se establecieron medidas de mitigación en caso de derrame.
El proceso de transferencia de petróleo duró 18 días y se realizó en una zona costera minada, enfrentando altas temperaturas y fuertes corrientes. Aunque la extracción es un hito positivo, el futuro de la transacción relacionada con el petróleo aún no está completamente definido. Las partes en conflicto en Yemen han sido responsabilizadas mutuamente por obstaculizar los esfuerzos para una extracción segura.
Las autoridades de la ONU están listas para iniciar negociaciones con los grupos en conflicto en Yemen para determinar un acuerdo de reparto de ganancias por el crudo, en vista de que el petróleo es propiedad mayoritaria de la compañía estatal de gas y petróleo de Yemen, SEPOC.
