El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha firmado un decreto que establece la suspensión de ciertas disposiciones de los tratados fiscales de doble tributación con Estados Unidos, países de la Unión Europea y otros considerados «estados hostiles». Esta medida, propuesta por los ministerios de finanzas y relaciones exteriores de Rusia, busca responder a las sanciones impuestas por estos países y preservar los intereses económicos y legales de Rusia.
El decreto, publicado en el portal oficial de información legal de Rusia, establece que la suspensión de los tratados de doble tributación estará en vigor hasta que los estados extranjeros en cuestión rectifiquen las violaciones que han afectado los intereses económicos y derechos legales de Rusia y sus ciudadanos, o hasta que los documentos pertinentes dejen de ser válidos.
Simultáneamente, se instruyó al gobierno ruso a tomar medidas para minimizar el impacto de esta suspensión en la economía del país. El Gabinete de Ministros presentará un proyecto de ley sobre la suspensión de estos tratados fiscales ante la Duma Estatal, mientras que el Ministerio de Relaciones Exteriores notificará la decisión a los estados extranjeros involucrados.
Entre los tratados de doble imposición suspendidos se encuentran los acuerdos con Estados Unidos, diseñados para evitar la doble tributación y prevenir la evasión fiscal sobre la renta y el capital. En total, Rusia suspendió estos acuerdos con 38 países, incluyendo Reino Unido, Canadá, Suiza, Japón, República Checa, Dinamarca, Noruega, Italia, Finlandia, Francia, Alemania, España y otros que han aplicado sanciones contra Rusia.
Los tratados de doble tributación tienen como objetivo evitar que una misma renta sea gravada dos veces en diferentes países y son fundamentales para fomentar la cooperación económica internacional. La suspensión de estos tratados representa un paso significativo en la respuesta de Rusia a las sanciones impuestas por varios países occidentales.
