Una encuesta realizada por S&P Global Insight indica que la economía del Reino Unido está «cerca de estancarse» debido a una significativa desaceleración del crecimiento empresarial. La actividad del sector privado en Gran Bretaña ha sido afectada por diversos factores, incluyendo la lentitud de la demanda, una inflación en aumento y costos de endeudamiento cada vez más altos. Estos factores han llevado al índice de producción compuesto PMI de julio a sus niveles más bajos en seis meses, según los datos compartidos el lunes.
La lectura del PMI de este mes fue de 50,7, por debajo de los 52,8 de junio y la más baja desde enero. Una lectura por encima de 50 indica crecimiento general, pero la desaceleración en el crecimiento empresarial ha generado preocupaciones sobre una posible recesión en el futuro.
Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global Market Intelligence, advirtió que la perspectiva económica se presenta «sombría» y que la tendencia de desaceleración podría aumentar el riesgo de que el Producto Interno Bruto (PIB) del Reino Unido caiga en el tercer trimestre.
El aumento de las tasas de interés y el incremento del costo de vida han impactado negativamente en los hogares británicos, obligando a millones de familias a recortar gastos. Por otro lado, los fabricantes han tenido que reducir la producción en respuesta a una severa caída en los pedidos tanto del mercado nacional como de exportación, como se muestra en los resultados de la encuesta.
La situación económica en el Reino Unido sigue siendo motivo de preocupación y los indicadores prospectivos señalan una mayor debilidad en el crecimiento en los próximos meses. Los efectos combinados de la desaceleración del crecimiento empresarial y los desafíos económicos presentan un escenario desafiante para el país y requieren una atención cuidadosa y estratégica por parte de las autoridades económicas.
