Las empresas del sector privado del Reino Unido han estado reduciendo su fuerza laboral al ritmo más rápido desde la crisis financiera mundial, aparte de los bloqueos pandémicos de Covid-19, ya que la producción cayó en septiembre, según datos publicados por S&P Global el viernes.
La última cifra preliminar del índice compuesto global de gerentes de compras (PMI) del S&P para el Reino Unido cayó a 46,8, frente a 48,6 en agosto, y alcanzó un mínimo de 32 meses. La lectura estuvo muy por debajo de la marca de 50, que separa el crecimiento de la contracción, y por debajo de lo que esperaban los economistas, dijo S&P.
«Los decepcionantes resultados de la encuesta PMI de septiembre significan que una recesión parece cada vez más probable en el Reino Unido», advirtió Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global Market Intelligence.
«La pronunciada caída de la producción señalada por los datos preliminares del PMI es consistente con una contracción del PIB a una tasa trimestral de más del 0,4%, con una desaceleración generalizada cobrando impulso que deja entrever pocas esperanzas de una mejora inminente».
El mercado laboral británico se enfrenta a un “cambio abrupto”, lo que ha llevado a las empresas a despedir personal al ritmo más rápido desde las secuelas de la crisis financiera mundial de 2008, excluyendo la pandemia, expresó S&P.
«Una de las principales preocupaciones en las perspectivas de inflación ha sido el crecimiento de los salarios, pero ahora que la encuesta señala la caída más pronunciada del empleo desde 2009, el poder de negociación salarial se está erosionando rápidamente».
(Economista jefe de negocios de S&P Global Market Intelligence, Chris Williamson)
En general, la actividad empresarial del sector privado en el Reino Unido cayó al ritmo más rápido desde marzo de 2009, ya que la crisis del costo de vida y los crecientes costos de endeudamiento hicieron mella en la demanda, concluyó S&P.
