El presidente Andrés Manuel López Obrador aclaró que los 32 migrantes que fueron secuestrados en Tamaulipas el 30 de diciembre pasado no fueron «rescatados», como inicialmente se informó, sino que fueron liberados por sus captores. El mandatario destacó que todos los migrantes están sanos y salvos.
Durante una conferencia de prensa, López Obrador explicó que los secuestradores privaron de la libertad a los migrantes con el objetivo de extorsionar a sus familiares que residen en Estados Unidos. La intervención de las autoridades fue efectiva, y los migrantes fueron liberados en un estacionamiento de un centro comercial después de ser trasladados desde el lugar original de su secuestro.
El presidente informó que entre los liberados había una niña de un año, y todos están rindiendo declaraciones ante el Ministerio Público estatal. La mayoría de los secuestrados eran de nacionalidad venezolana y hondureña, y al parecer, los secuestradores liberaron a los mexicanos, centrándose en el cobro de extorsiones a los familiares estadounidenses de los migrantes.
López Obrador no proporcionó información sobre detenidos en relación con este secuestro masivo y se abstuvo de revelar el nombre del cartel que pudo haber estado involucrado, ya que la investigación aún está en curso.
