El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el Gobierno de México está llevando a cabo una iniciativa para rescatar los trenes de pasajeros y promover una alternativa de movilidad no contaminante y eficaz en beneficio de la población. Antes de que concluya su mandato en 2024, se prevé la implementación de más de tres mil kilómetros de vías férreas en proyectos prioritarios como el Tren Maya, el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec y el Tren Interurbano México-Toluca. Estos ambiciosos proyectos históricos marcan un punto de inflexión al poner fin a la privatización característica de las administraciones pasadas.
Durante una conferencia de prensa matutina, el presidente López Obrador afirmó: «Así como estamos rescatando Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, estamos rescatando los ferrocarriles de pasajeros que durante el periodo neoliberal desaparecieron, los privatizaron y sólo dejaron los ferrocarriles de carga.»
El secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jorge Nuño Lara, presentó un informe sobre el avance del ramal Buenavista-Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) del Tren Suburbano, un proyecto que conectará la Ciudad de México con el Estado de México. Este ramal constará de 42 kilómetros de doble vía electrificada y seis nuevas estaciones, y se espera un tiempo de recorrido de 39 minutos sin necesidad de transbordo.
Para mejorar la conectividad y agilizar el transporte de pasajeros al AIFA, se implementó una línea ya existente entre Buenavista y Cuautitlán, y se construyeron 30 kilómetros de vías confinadas para trenes de pasajeros, separando las vías de carga y requiriendo su reubicación.
Se proyecta que diez trenes con capacidad para 719 pasajeros cada uno brinden servicio de itinerario establecido y espacio de equipaje, beneficiando principalmente a los habitantes de los municipios de Tultitlán, Tultepec y Nextlalpan. La inversión para esta obra es de 25 mil 800 millones de pesos, y se estima que la conclusión de la obra civil será en febrero de 2024, seguida por las obras de electromecánica en marzo del mismo año. El periodo de pruebas está programado para llevarse a cabo de abril a junio de 2024.
El avance global del proyecto a la fecha es del 43%, distribuido en un 28% en obra civil, un 10% en material rodante y un 5% en subsistemas ferroviarios.
Además, se contempla la construcción de un patio de maniobras de 12 kilómetros de vías, tres viaductos ferroviarios con una longitud de 2.58 kilómetros para permitir el paso y servicio a industrias en la zona, así como nueve pasos vehiculares y nueve pasos peatonales para garantizar la seguridad de los usuarios.
El tren de pasajeros operará a una velocidad máxima de 120 kilómetros por hora y una velocidad comercial de aproximadamente 65 kilómetros por hora, siendo normativamente confinado para garantizar la seguridad de los pasajeros durante su operación.
El impulso de estos proyectos ferroviarios representa un importante avance hacia la modernización y desarrollo de un sistema de transporte sostenible en México, fomentando la movilidad eficiente y amigable con el medio ambiente.
