La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) rechazó las presiones de Estados Unidos para investigar a políticos mexicanos señalados como “narcopolíticos” en un informe del Departamento de Estado. En un comunicado, la Cancillería, encabezada por Juan Ramón de la Fuente, afirmó que México no aceptará injerencias en su soberanía y abogó por acuerdos bilaterales basados en el respeto mutuo.
El informe estadounidense, publicado el 10 de junio, solicita indagar presuntos nexos de funcionarios con el crimen organizado, sin especificar nombres. La SRE calificó el documento como “injerencista” y carente de pruebas. Durante la conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum respaldó esta postura, destacando que las acusaciones buscan desestabilizar al gobierno. México propuso una mesa de diálogo con EE.UU. para abordar el tema del narcotráfico de manera conjunta, priorizando la cooperación en lugar de confrontaciones. La Cancillería reiteró su compromiso con la lucha contra el crimen organizado, pero bajo la jurisdicción nacional.
