Especialistas del sector privado han reducido nuevamente sus expectativas de crecimiento económico para México en 2025, proyectando ahora un incremento del PIB de solo 0.41%, una caída significativa en comparación con el 0.80% que estimaban en marzo. Esta cifra representa la previsión más baja en al menos un año y se aleja drásticamente del 2.01% que los analistas habían proyectado en enero.
📉 Proyecciones económicas
🔹 Banxico mantiene su previsión en 0.6%.
🔹 Algunos grupos financieros como Banamex, BNP Paribas y UBS esperan cero crecimiento en el PIB para 2025.
🔹 La Secretaría de Hacienda mantiene su estimación entre 2% y 3%, aunque se espera un ajuste a la baja.
📌 Factores que amenazan la economía
El comercio exterior es señalado como el principal riesgo para el crecimiento económico, con especial preocupación por el T-MEC y el Tratado Transpacífico (CPTPP).
19% de los analistas identifican la política comercial como la mayor amenaza, por encima de la inseguridad y la incertidumbre económica interna.
📊 Expectativas para 2026
🔹 Se proyecta una leve recuperación con un crecimiento del 1.59%, aunque esta previsión también ha sido ajustada a la baja respecto al mes anterior (1.65%).
💰 Inflación, tasas de interés y tipo de cambio
🔹 La inflación se prevé en 3.72% al cierre de 2025, aún fuera del objetivo del 3% de Banxico, pero dentro del margen permitido.
🔹 Se espera que la tasa de interés termine en 7.97%, lo que implicaría una reducción de 100 puntos base respecto a su nivel actual de 9.00%.
🔹 El tipo de cambio cerraría el año en 20.85 pesos por dólar, ligeramente por encima de la previsión gubernamental de 20.00 pesos.
⚠️ Mal clima para los negocios e inversión
🔹 95% de los analistas considera que la economía no está mejor que hace un año.
🔹 63% cree que el clima de negocios empeorará.
🔹 71% opina que no es un buen momento para invertir en México.
🔹 Entre los mayores obstáculos destacan la falta de Estado de derecho y el crimen (27% de las respuestas).
Las expectativas económicas para México siguen deteriorándose, con previsiones de crecimiento cada vez más bajas y una fuerte incertidumbre en el comercio exterior. La inflación y las tasas de interés muestran signos de estabilidad, pero la falta de confianza en el país podría frenar inversiones y afectar el desempeño económico en los próximos años.