Bélgica ha anunciado que enviará 1.800 millones de dólares en ingresos fiscales generados por activos rusos congelados a Ucrania. El primer ministro belga, Alexander De Croo, hizo el anuncio después de una reunión con el presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, en Bruselas. Estos fondos se entregarán a Kiev el próximo año y se utilizarán para financiar equipo militar, apoyo humanitario y proyectos de reconstrucción.
Además de esta ayuda financiera, Bélgica también se comprometió a enviar aviones de combate F-16 a Ucrania en 2025 y proporcionar capacitación al personal ucraniano. Esto representa un fuerte respaldo de Bélgica a Ucrania en medio del conflicto con Rusia.
Estos ingresos provienen de activos rusos congelados en Bélgica, y gran parte de estos activos son propiedad del banco central de Rusia. Euroclear, una cámara de compensación de la UE con sede en Bélgica, reveló que había acumulado más de 1.700 millones de euros en ganancias de estos activos rusos congelados en el primer semestre de 2023.
La Unión Europea (UE) ha congelado un total de 207.000 millones de euros en activos y reservas rusos desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania. Esta medida tiene como objetivo presionar a Rusia para poner fin al conflicto y respaldar a Ucrania en su proceso de reconstrucción.
La decisión de Bélgica de enviar estos fondos a Ucrania refleja el compromiso de la comunidad internacional en apoyar a Ucrania en este momento crítico y ayudar en su proceso de recuperación.
Además, se está considerando la posibilidad de imponer un impuesto a las ganancias extraordinarias generadas por los activos congelados, lo que podría generar alrededor de 3.000 millones de euros adicionales para apoyar la reconstrucción de Ucrania.