El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, en una conferencia de prensa con el presidente Andrés Manuel López Obrador, advirtió sobre los riesgos asociados al consumo de drogas inyectables y la posibilidad de contagio de infecciones como la Hepatitis C. Esta enfermedad puede dañar gravemente el hígado, provocar cirrosis hepática, pérdida del funcionamiento del órgano e incluso cáncer, si no se aborda adecuadamente.
El subsecretario señaló que la infección de Hepatitis C generalmente se adquiere a través del uso de agujas, jeringuillas y otros instrumentos punzocortantes contaminados, que son empleados en el consumo de drogas inyectables como cocaína, opioides, somníferos, estimulantes anfetamínicos, alucinógenos y sedantes, que son algunas de las drogas más prevalentes en México. Otros factores de riesgo en el país incluyen el uso de cristal y la práctica sexual bajo los efectos de sustancias nocivas.
A nivel mundial, aproximadamente una cuarta parte de las 1.7 millones de nuevas infecciones por Hepatitis C que ocurren cada año están asociadas al consumo de drogas inyectables.
Ante la proximidad del Día Mundial contra la Hepatitis, que se conmemora el 28 de julio, el subsecretario López-Gatell Ramírez destacó la implementación del Programa Nacional de Eliminación de la Hepatitis C en México por parte del Gobierno de la Cuarta Transformación, una iniciativa sin precedentes en el país y América Latina. Este programa ofrece acceso gratuito a pruebas y tratamiento, con un enfoque centrado en la atención primaria de la salud y estrategias dirigidas a las poblaciones más afectadas.
El objetivo de esta estrategia es eliminar por completo el virus de Hepatitis C de la población mexicana. México fue el primer país en poner en marcha un programa de esta naturaleza. El subsecretario enfatizó que el esquema de tratamiento es altamente efectivo y curativo, logrando eliminar por completo el virus con el uso oportuno de los medicamentos adecuados.
Desde su inicio en 2020 hasta la fecha de la conferencia, el número de unidades de salud que ofrecen pruebas de diagnóstico y tratamiento de Hepatitis C ha aumentado de 42 a 629, con la asistencia adicional de telementoría desde el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el sida (Censida).
Como resultado de estas iniciativas, se han realizado 2 millones 356 mil 393 pruebas de detección de Hepatitis C y se han diagnosticado a 28 mil 978 personas. De ellas, 22 mil 748 han recibido tratamiento y se han curado satisfactoriamente. El tratamiento tiene una duración de aproximadamente tres a cuatro meses, logrando resolver completamente la infección.
El Gobierno de la Cuarta Transformación sigue comprometido con la salud y bienestar de la población mexicana, y a través de programas como este, busca reducir los riesgos asociados al consumo de drogas inyectables y eliminar la Hepatitis C en el país.