El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su descalificación hacia la cobertura mediática que rodeó la caída de una trabe en la construcción del tren El Insurgente. Durante una conferencia, el mandatario consideró que la difusión del incidente fue llevada a cabo bajo un enfoque sensacionalista, señalando: «¡qué barbaridad! ¡Qué escándalo! Todos. Sólo les faltó decir ‘lastima que no murió nadie. Es vergonzoso».
López Obrador optó por no profundizar en detalles sobre el suceso, pero sugirió que la amplia cobertura estaba relacionada con «una guerra sucia muy intensificada, porque estamos en temporada electoral, en vísperas de elecciones presidenciales, entonces están desatados. Nada más que la gente tenga este antecedente para que se cubra, tenga un filtro y actúe de manera prudente porque sí esta fuerte el bombardeo».
Con estas declaraciones, el presidente busca contextualizar el incidente en el marco de una temporada electoral y llama a la ciudadanía a ejercer un juicio crítico frente a la información difundida, sugiriendo que el evento fue exagerado con fines políticos.
