La compañía espacial china de capital privado Galactic Energy puso en órbita cuatro satélites a bordo del cohete Ceres-1, lanzado este martes desde el mar, informó South China Morning Post. El exitoso despegue del cohete de combustible sólido, desde una plataforma móvil ubicada frente a la costa oriental de China, constituye un hito al convertirse en la primera empresa privada del país en alcanzar ese logro.
El vehículo de lanzamiento estaba fijado al barco con un mecanismo de bloqueo de tira de magnesio, que garantizaba la seguridad vertical del cohete en condiciones de vibración propias del entorno marino. Este sistema sólido de bloqueo y liberación de cohetes, que no utiliza explosivos, es el primero de su tipo en el mundo.
El vehículo espacial Ceres-1, de 20 metros de largo y 1,4 metros de ancho, puede transportar 400 kilos a la órbita terrestre baja. En esta ocasión, transportó los satélites Tianqi del 21 al 24, que forman parte de una constelación de 38 satélites de una red de Internet, que la empresa privada china Guodian Gaoke pretende tener lista el próximo año. La constelación proporcionará diversos servicios de datos a clientes civiles y militares.
Sam Bresnick, investigador del Centro de Seguridad y Tecnología Emergente de la Universidad de Georgetown (EE.UU.), señaló que los lanzamientos marítimos ofrecen varias ventajas sobre los lanzamientos terrestres. El experto indicó que, en primer lugar, proporcionan flexibilidad en términos de ubicación geográfica y permiten lanzamientos a diferentes inclinaciones orbitales. En segundo lugar, pueden ser más seguros, ya que son capaces de ubicarse lejos de las áreas pobladas, sin afectar las rutas aéreas o marítimas.
Asimismo, Bresnick puntualizó que varias compañías espaciales estadounidenses estaban explorando lanzamientos y recuperación desde el mar.
