«La valoración jurídica internacional de Suiza se refiere a la situación específica de Suiza, en la que, a diferencia de la Unión Europea, no se generan ingresos extraordinarios en relación con los activos del Banco Central ruso», declaró Maienfisch.
El portavoz subrayó que el Gobierno siempre respeta el sistema jurídico suizo y las obligaciones de Suiza en virtud del derecho internacional.
Asimismo, señaló que las autoridades suizas siguen de cerca los debates internacionales sobre los activos congelados de Rusia e intercambian ideas con los socios.
«Es fundamental que cualquier enfoque acordado internacionalmente sea plenamente coherente con los principios del estado de derecho y el derecho internacional y garantice la preservación de la estabilidad financiera para evitar consecuencias no deseadas para los mercados financieros y las operaciones futuras de los bancos centrales en el sistema financiero internacional», añadió Maienfisch.
La UE y el Grupo de los Siete (G7) bloquearon activos rusos por valor de 300.000 millones de euros desde el comienzo de la operación militar especial de Ucrania, que Rusia inició en febrero de 2022 para frenar los bombardeos de Kiev contra los civiles de Donetsk y Lugansk.
Unos 200.000 millones de euros de inversiones rusas se encuentran inmovilizados en las cuentas de Euroclear, uno de los mayores sistemas de compensación y liquidación de valores financieros en Europa, con sede en Bélgica.
El G7 acordó en su reciente cumbre de Apulia, Italia, proporcionarle a Ucrania para fin de año 50.000 millones de dólares en préstamos que serán reembolsados con los rendimientos de los activos congelados de Rusia.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso calificó la decisión del bloque occidental de expolio que afecta no solo a los inversores particulares, sino también a los fondos soberanos.
El canciller ruso, Serguéi Lavrov, advirtió que su país respondería de manera recíproca con la confiscación de los activos europeos congelados en Rusia.