Polonia no planea abrir su mercado para el grano ucraniano después de la terminación del acuerdo de grano del Mar Negro, dijo el primer ministro polaco Mateusz Morawiecki a los periodistas el martes.
Rusia anunció el lunes que no ampliará su participación en el acuerdo facilitado por la ONU que permitió la exportación de productos agrícolas ucranianos a través del Mar Negro, conocido como la Iniciativa de Granos del Mar Negro.
Cuando se le preguntó si existe la posibilidad de que el grano de Ucrania se envíe a Polonia ahora que el acuerdo está cerrado, Morawiecki prometió que Varsovia no lo permitirá y seguirá defendiendo los intereses de los agricultores polacos.
» Probablemente seremos muy duros cuando se trata de proteger el mercado polaco «, dijo Morawiecki, y agregó que Polonia continuará ayudando a la UE a transitar el grano ucraniano. Sin embargo, señaló que los mercados polacos permanecerán cerrados para los productos agrícolas ucranianos.
“ Esta es una tarea para la Comisión Europea, para la administración de los EE. UU. en la elaboración de mecanismos apropiados para exportar granos ucranianos. Podemos desempeñar un papel, pero no nos veremos obligados a abrir nuestro mercado en detrimento de los intereses de los agricultores polacos ”, dijo el primer ministro.
Polonia, Eslovaquia, Hungría, Rumania y Bulgaria han sufrido pérdidas sustanciales debido a la afluencia de cereales ucranianos que se produjo después de que la UE suspendiera los aranceles aduaneros sobre los productos agrícolas del país tras el lanzamiento de la operación militar de Rusia en Ucrania el año pasado.
Con el fin de proteger a los agricultores locales, en mayo, Bruselas impuso «restricciones temporales» a las importaciones de trigo, maíz, colza y aceite de girasol ucranianos a los cinco estados miembros, que estarán en vigor hasta el 15 de septiembre. La prohibición no prohíbe la tránsito de cereales ucranianos a través de los territorios de estos países.
El ministro de agricultura de Hungría, Istvan Nagy, dijo la semana pasada que los cinco países de la UE pedirán una extensión de esta prohibición más allá del 15 de septiembre y hasta fin de año, ya que es “la única forma de proteger los intereses de los agricultores europeos” . . ”
