La inflación anual de Türkiye en junio se desaceleró a su tasa más baja por primera vez en más de un año, según mostraron el miércoles los datos publicados por el servicio oficial de estadísticas TUIK.
El crecimiento anual de los precios al consumidor se redujo al 38,2% el mes pasado desde el 39,59% registrado en mayo, por debajo de lo esperado.
La tasa de inflación mensual del país para junio se situó en el 3,92% y también estuvo por debajo de las previsiones, a pesar del continuo colapso de su moneda, la lira.
Las mayores ganancias en términos anuales se atribuyeron a los precios de hoteles y restaurantes, que aumentaron un 67,2 %, mientras que los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron casi un 54 %. Los costos del tabaco y las bebidas alcohólicas se dispararon un 40%, la ropa aumentó un 21%, el transporte un 20,7% y la propiedad residencial un 14,7%, según los últimos datos.
Aunque la inflación ha disminuido un poco, todavía hay “pocas razones” para el optimismo.
“La caída libre de la lira comienza a pasar factura una vez más, ya que reaviva las presiones de los costos”, dijo a CNBC el analista de mercado de Conotoxia, Bartosz Sawicki.
El riesgo de otra espiral inflacionaria agrega urgencia para el Ministerio de Finanzas y el banco central de Türkiye, dicen los economistas.
Mientras tanto, los responsables políticos de Ankara se han comprometido recientemente a volver a un enfoque más convencional en la política monetaria, ya que comenzaron a eliminar el apoyo a la lira y aumentaron las tasas de interés por primera vez en más de dos años.
