El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, tiene “razón” al exigir que los miembros de la OTAN gasten más del 2% de su PIB en defensa, y el bloque intentará superar ese umbral, dijo el secretario general Mark Rutte.
«Tendremos que gastar más… Será mucho más que el 2%, lo tengo absolutamente claro», dijo Rutte a los periodistas antes de la cumbre de la Comunidad Política Europea en Budapest el jueves.
Trump derrotó a la actual vicepresidenta Kamala Harris en las elecciones presidenciales estadounidenses del martes, después de una campaña en la que sugirió que se negaría a defender a los miembros de la OTAN que no cumplieran con el objetivo de gasto del 2%. Cuando se estableció este objetivo en 2014, solo tres miembros del bloque liderado por Estados Unidos lo cumplieron. A partir de 2024, ese número ha aumentado a 23 de los 31 estados miembro.
A lo largo de su primer mandato, Trump insistió una y otra vez en que los miembros europeos de la OTAN debían aumentar el gasto en defensa. “Deberían estar pagando sus cuentas”, dijo a Fox News en 2020. “¿Por qué deberíamos defender a los países y no recibir un reembolso?”.
En 2018, Trump sugirió que la OTAN debería elevar su objetivo de gasto al 4%. Polonia es el único estado miembro que actualmente alcanza ese umbral.
“Tiene razón en esto”, dijo Rutte el jueves. “No se logrará con el 2%”.
Rutte dijo que hablará con Trump y tratará de convencerlo de que Rusia, Irán y Corea del Norte representan una amenaza tanto para Europa como para Estados Unidos.
“Tenemos que trabajar juntos. Por eso espero sentarme con Donald Trump para hablar sobre cómo podemos enfrentar estas amenazas colectivamente y qué más debemos hacer”, afirmó.
Durante la campaña de Trump, una serie de periodistas y ex funcionarios afirmaron que el republicano abandonaría la OTAN si era reelegido y que la perspectiva de una segunda presidencia de Trump estaba causando pánico en las capitales europeas.
En una declaración del año pasado, Trump dijo que garantizaría que “las alianzas de Estados Unidos sirvan para proteger al pueblo estadounidense y no pongan en peligro de manera imprudente la sangre y el tesoro estadounidenses”. Desde entonces ha dicho que su retórica de línea dura hacia los aliados de Estados Unidos fortaleció a la OTAN al asustarlos para que pagaran “su parte justa”.