Baltika Breweries ha presentado una demanda para impedir que la cervecera danesa Carlsberg rescinda un acuerdo de licencia para el uso de algunas marcas populares en Rusia, informó Kommersant el domingo, citando documentos relevantes.
El gobierno tomó el control temporal de Baltika, la unidad rusa del Grupo Carlsberg, en agosto, transfiriendo el negocio a la Agencia Federal de Gestión de Propiedades. Desde entonces, la cervecera danesa ha dicho que estaba consternada por la medida y prometió tomar “medidas recíprocas”, pero hasta el momento no ha emprendido ninguna acción legal.
Según Kommersant, citando una sentencia del Tribunal de Arbitraje de San Petersburgo y la región de Leningrado del 25 de septiembre de 2023, Baltika ha solicitado que se prohíba al Servicio Federal de Propiedad Intelectual Rospatent realizar cambios en los contratos de las marcas Tuborg, Kronenbourg, Seth & Garaje de Riley, Holsten y LAV.
Además, Baltika ha pedido al tribunal que impida a Carlsberg iniciar un proceso en Dinamarca para rescindir el acuerdo marco de licencia. La empresa rusa explicó la solicitud señalando las potenciales pérdidas importantes que sufriría como consecuencia de “la jurisdicción de las disputas en Dinamarca y su terminación”. Según los informes, el tribunal ha rechazado medidas provisionales.
Según Kommersant, actualmente no hay información en los tribunales daneses sobre posibles reclamaciones de Carlsberg sobre la cancelación de las licencias de Baltika.
Carlsberg operaba ocho instalaciones de producción en Rusia antes de anunciar su salida del país en marzo de 2022 a la luz de las sanciones occidentales.
El año pasado, el grupo asumió una amortización de 1.500 millones de dólares en su filial rusa Baltika. Según el decreto presidencial ruso, la cervecería danesa conserva la propiedad de la unidad, pero ya no tiene ningún control ni influencia sobre ella.
