Durante el primer trimestre de 2025, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) logró una recaudación histórica de 1.52 billones de pesos, lo que representa un aumento del 17.8% respecto al mismo periodo del año anterior. Este incremento destaca no solo por su magnitud, sino por haberse conseguido sin la implementación de una nueva reforma fiscal y en un contexto económico marcado por una desaceleración.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), este es el tercer mayor crecimiento porcentual en recaudación tributaria desde que se tienen registros comparables. Los únicos aumentos superiores ocurrieron en 1998, impulsados por la creación del propio SAT, y en 2015, tras la reforma fiscal del sexenio de Enrique Peña Nieto.
Los ingresos recaudados en este periodo superan los recursos presupuestados para programas sociales federales en 2025, y también rebasan la meta establecida por la Ley de Ingresos de la Federación, con un cumplimiento del 102.5%.
El impuesto sobre la renta (ISR) fue el que más contribuyó, con 901 mil 258 millones de pesos, lo que representa un crecimiento de 185 mil millones en comparación anual. En tanto, el impuesto al valor agregado (IVA) aportó 400 mil 444 millones de pesos, también con un notable incremento de 81 mil millones respecto al primer trimestre de 2024.
Este desempeño fiscal, que se logró sin necesidad de nuevas leyes ni ajustes tributarios, confirma un fortalecimiento en la eficiencia recaudatoria del SAT, aunque también plantea preguntas sobre el esfuerzo fiscal de los contribuyentes en medio de una economía menos dinámica.