Moscú y Beijing están colaborando activamente en la implementación del proyecto energético Power of Siberia 2, que fue uno de los temas discutidos durante la visita oficial del presidente Xi Jinping a Rusia la semana pasada.
Se espera que el gasoducto Power of Siberia 2 suministre 50 mil millones de metros cúbicos (bcm) de gas al año, lo que, según Novak, reemplazaría completamente la red de energía Nord Stream.
Durante su reunión con el líder chino la semana pasada, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que se habían acordado casi todos los parámetros del acuerdo sobre el nuevo gasoducto.
También destacó que la cooperación energética entre los dos países ha estado creciendo, con Rusia convirtiéndose en un proveedor estratégico de petróleo, gas, carbón y electricidad para China.
El gasoducto Power of Siberia fue el primer gasoducto en suministrar gas ruso a China y forma parte de un acuerdo de 30 años y 400.000 millones de dólares entre Gazprom y la Corporación Nacional del Petróleo de China, que se firmó en mayo de 2014.