El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, calificó la irrupción de manifestantes en el salón de plenos, durante la discusión de la reforma judicial, como un “intento de golpe al poder”. Aunque descartó presentar denuncias penales, señaló que la toma violenta del recinto fue un acto premeditado y grave.
“Quieren presentarlo como un grupo de trabajadores o estudiantes enardecidos, pero fue un asunto armado», afirmó el senador morenista, refiriéndose a la irrupción durante las discusiones en el Senado. Según Noroña, la situación fue promovida por declaraciones de la senadora del PAN, María de Jesús Díaz Marmolejo, quien supuestamente incitó a la violencia contra quienes votaran a favor de la reforma.
El legislador también acusó a la oposición de festejar con los manifestantes durante la toma del Senado, destacando que «esto me parece muy grave», y que la oposición debe asumir la responsabilidad de los hechos ocurridos.
En cuanto al voto del panista Miguel Ángel Yunes Márquez a favor de la reforma judicial, Fernández Noroña indicó que en Morena se valoró dicha decisión, asegurando que tanto Yunes Márquez como su padre, Miguel Ángel Yunes Linares, cuentan con el respaldo del bloque oficialista, incluyendo los partidos Verde Ecologista y del Trabajo. Subrayó que sería incorrecto dejar desamparado a Yunes Márquez después de haber tomado una decisión tan delicada.
Fernández Noroña concluyó que la presión sobre la oposición fue intensa, pero que la situación fue bien resuelta con la aprobación de la reforma judicial.
