El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, propuso ante el Consejo Nacional de Seguridad Pública ampliar la figura de identidad reservada para víctimas, denunciantes y testigos hasta el momento mismo del desahogo de la prueba en el juicio oral, con el objetivo de combatir la impunidad que generan las amenazas y represalias de la delincuencia organizada.
Durante la sesión presidida por la presidenta Claudia Sheinbaum, Bedolla argumentó que la revelación temprana de los datos de las personas protegidas ha provocado homicidios, secuestros y desapariciones que terminan por debilitar la acusación y generar insuficiencia probatoria.
El mandatario michoacano solicitó reformar el artículo 220 del Código Nacional de Procedimientos Penales para que el anonimato pueda mantenerse hasta el final del desahogo de la prueba, medida que, dijo, permitiría al Ministerio Público obtener más sentencias condenatorias, especialmente en delitos como la extorsión.




