En cuanto las autoridades mexicanas supieron de la subasta, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) interpuso una denuncia en la FGR.
La representación de México en Lisboa, Portugal, recuperó una pieza arqueológica de origen mexicano que podría tener hasta 2 mil 300 años de antigüedad y que estaba por ofertarse en la casa de subastas Renascimento-Avaliações e Leilões, según informó este jueves el Gobierno mexicano.
En un comunicado conjunto, las Secretaría de Relacione Exteriores (SRE) y de Cultura explicaron que por sus características físicas y morfológicas, “la pieza, elaborada en barro y de 43 centímetros de altura, representa a una figura femenina sentada sobre sus rodillas, lleva el torso desnudo y tiene un vestido”.
Además, “en la cabeza se observa un tocado cónico y en los hombros presenta escarificaciones”, por lo que corresponde al estilo Tala-Tonalá de la tradición cultural Tumbas de Tiro, procedente del actual estado de Jalisco, en el occidente de México, y manufacturada entre los años 300 a.C. al 600 d.C.
En la nota se apuntó que en cuanto las autoridades mexicanas supieron de la subasta, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) interpuso una denuncia en la Fiscalía General de la República (FGR).
Al mismo tiempo, la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, exhortó a la casa de subastas a detener la venta de dicha pieza.
Frausto consideró que la pieza “representa un legado invaluable de nuestras culturas ancestrales, que forman parte del patrimonio histórico mexicano y una muestra de la diversidad y riqueza cultural; vestigio de lo que somos y de las culturas vivas de los pueblos originarios”.
La Secretaría de Cultura y el INAH reconocieron la determinación de la casa de subastas Renascimento-Avaliações e Leilões para detener la venta de este bien patrimonial y, con ello, emitir un mensaje que fortalece la conciencia del combate al tráfico de bienes culturales.
A nivel global, las embajadas y consulados de México han recuperado unas 13 mil 500 piezas culturales durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, que inició el 1 de diciembre de 2018.
El Ejecutivo mexicano ha combatido subastas en ciudades como Nueva York, París y Roma, en las que aparecen objetos robados o que pertenecen al patrimonio de México.
Además, se intensificaron las demandas ante Gobiernos extranjeros para recuperar piezas arqueológicas y artísticas.