Después de más de 10 horas de maratónica sesión, el pleno de la Cámara de Diputados avanzó también anoche en la aprobación de las reformas propuestas por Morena y sus aliados del PT y PVEM a la Ley de Amnistía, y avalaron el dictamen con 258 votos a favor, 205 en contra y una abstención.
No obstante, la discusión continuaría hasta la madrugada de este jueves para la presentación y el debate, en lo particular, de 71 “reservas” o propuestas de modificación que presentaron los partidos de oposición.
El dictamen añade un artículo nuevo a la actual ley, que plantea que el presidente podrá liberar de la cárcel a personas procesadas, sentenciadas o quienes hayan enfrentado acción penal que pudieran presentar elementos para conocer la verdad en casos relevantes.
Aunque Morena insistió en que “la oposición miente y que la reforma no es para dar impunidad a delincuentes”, el diputado del PAN, Enrique Sosa Gutiérrez, pidió con dureza a los diputados de Morena, PT y PVEM, que “tengan cuidado, porque con esta reforma entregan al Presidente las llaves de la cárcel para sacar a sus compas, a sus cuates, a sus socios del Cártel de Sinaloa”.
Encolerizado, el diputado no se resistió y gritó desde la tribunas –rodeado de sus compañeros de bancada con pancartas que decían “Ley de abrazos a criminales” y recordando la frase del exdiputado Porfirio Muñoz Ledo fuera de los micrófonos– “chinguen a su madre, qué manera de legislar”.
El diputado morenista de Ayotzinapa, Manuel Vázquez, acusó a los diputados de oposición de “chismosos, porque el artículo 2 de la Ley de Amnistía, en este caso, no aplicaría”. Sue Bernal, del PRI, sostuvo que “es un retroceso en la justicia, es ampliar el camino a la impunidad de Morena”.