En un reciente pronunciamiento, el presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su crítica hacia la jueza en Material Penal de la Ciudad de México, María del Carmen Sánchez Cisneros, por conceder una suspensión a Néstor Isidro “N”, conocido como «El Nini» y jefe de seguridad de los Chapitos, evitando así su extradición a Estados Unidos.
López Obrador no titubeó al calificar este hecho como un acto de corrupción y cuestionó la integridad del sistema judicial. En sus palabras: «O sea, si esto no es corrupción, que me digan los ministros de la corte, ah y el Consejo de la Judicatura, ¿de qué se trata, esto es derecho? Esto es chueco, a todas luces, no se necesita ser doctor en derecho, pertenecer al Instituto de Ciencias Jurídicas de la UNAM o a los colegios de abogados».
Asimismo, el mandatario aprovechó la ocasión para señalar la falta de denuncias por parte de instituciones como la Corte y el Consejo de la Judicatura en casos similares, calificando su silencio como cómplice. En este contexto, reiteró su propuesta de elegir a los integrantes del Poder Judicial mediante el voto popular como medida para garantizar la integridad y la transparencia en el sistema judicial.
López Obrador concluyó enfatizando la necesidad de contar con jueces y ministros íntegros, honestos e incorruptibles, comprometidos verdaderamente con el servicio a la ciudadanía y la sociedad, y no al servicio de la delincuencia, ya sea de cuellos blancos o de la delincuencia organizada.
