El presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, afirmó en una entrevista al diario The Sun que los servicios especiales rusos están preparando una operación para derrocarlo denominada «Maidán-3«.
«El nombre de la operación es Maidán-3. Su objetivo es cambiar al presidente. Es un adiós. Quizás no sea matando. Quiero decir, es cambiar. Utilizarán todos los instrumentos que tengan. Así que esa es la idea, hasta finales de año. Incluso le han puesto nombre a la operación. Pero ya ve, podemos vivir con ello«, cita el medio británico las palabras del mandatario.
Zelenski también volvió a defender que la celebración de elecciones presidenciales previstas para el próximo año en Ucrania es imposible e ilegal debido a la ley marcial imperante en el país y porque crearían una división en la sociedad en medio del conflicto con Rusia.
Además, afirmó que desde el inicio de la operación especial militar rusa ha sobrevivido al menos a cinco o seis atentados contra su vida, y lo comparó con el «coronavirus», señalando que es como una enfermedad cada vez más fácil de superar. En este contexto, el mandatario dijo no saber el número exacto de intentos de asesinato que ha sufrido, al tiempo que se negó a revelar si han existido planes similares por parte de Ucrania.
«No puedo discutir con usted ninguna operación especial de la inteligencia ucraniana o del Servicio Secreto o de algunas fuerzas especiales. Hay momentos de los que no hablamos«.
Al ser preguntado si Kiev aprovecharía la «oportunidad de matar» al presidente ruso Vladímir Putin, Zelenski contestó que «esto es una guerra y Ucrania tiene todo el derecho a defender su tierra«.
Golpe de Estado patrocinado desde el extranjero
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declaró este martes que las protestas de Maidán en Kiev fueron un golpe de Estado patrocinado desde el extranjero.
«Lo llamamos ‘Maidán’, de hecho, fue un golpe, un golpe de Estado que estuvo patrocinado desde el extranjero. Las cosas deben llamarse por su nombre«, dijo a los periodistas, citado por medios locales. Además, enfatizó que el patrocinio del golpe fue reconocido directamente e indirectamente por representantes de otros países, lo cual tampoco es «un secreto para nadie».
«Lo principal para nosotros es lograr nuestros objetivos, para ello sigue en curso una operación militar especial«.
