La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció la adopción de un acuerdo global sin precedentes entre 194 países para fortalecer la preparación y respuesta ante futuras pandemias. Firmado tras dos años de negociaciones, el pacto busca mejorar la cooperación internacional en prevención, detección y manejo de de crisis sanitarias.
El acuerdo establece un fondo común para financiar respuestas rápidas, un sistema de alerta global para detectar brotes y protocolos para garantizar el acceso equitativo a vacunas y tratamientos. La OMS destacó que el tratado responde a las lecciones dejadas por la pandemia de COVID-19, que expuso desigualdades en el acceso a recursos médicos.
Países de bajos ingresos, como los de África y América Latina, celebraron el compromiso, aunque algunos expresaron preocupación por la implementación en regiones con sistemas de salud frágiles. Por otro lado, críticos, incluidos grupos en redes sociales, advierten sobre posibles restricciones a la soberanía nacional en decisiones sanitarias, un punto que la OMS desmintió, aclarando que el acuerdo respeta la autonomía de los estados.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, calificó el tratado como un “hito para la salud global”. Se espera que entre en vigor en 2026, tras ratificaciones nacionales, marcando un nuevo capítulo en la lucha contra pandemias.
