El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, promueve la candidatura de la disidente cubana Rosa María Payá para integrar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), según fuentes diplomáticas. Rubio, quien también actúa como administrador interino de USAID, busca que la OEA ratifique a Payá, destacándola como una voz clave contra el gobierno cubano.
Payá, líder del proyecto Cuba Decide, ha recibido desde 2013 el respaldo de Rubio y otros políticos conservadores estadounidenses, además de financiamiento de USAID por más de 2 millones de dólares anuales. Su candidatura es vista como un intento de Washington para presionar a La Habana, aunque críticos la acusan de alinearse con intereses estadounidenses y de atacar programas humanitarios cubanos, como las brigadas médicas.
El gobierno de Cuba rechazó la nominación, calificándola de “intervencionista”. La CIDH, organismo autónomo de la OEA, aún no ha confirmado la elección, que requiere el respaldo de los estados miembros. Analistas advierten que la candidatura podría polarizar a la región, mientras que Rubio insiste en que Payá representa la defensa de los derechos humanos. La decisión final se espera en la próxima asamblea de la OEA.
