Cerca de 1,000 embarcaciones enfrentan bloqueos diarios en sus señales de GPS cerca de la costa de Irán, según el Centro MICA de la Armada francesa. Estas interferencias, registradas desde el 13 de junio, complican la navegación segura, especialmente de noche o en condiciones de baja visibilidad, en el estratégico estrecho de Ormuz, por donde transita el 25% del crudo mundial.
El Centro MICA, que fomenta la cooperación entre armadas y el sector marítimo, señaló que las interrupciones probablemente contribuyeron al reciente choque entre los petroleros Front Eagle y Adalynn, aunque las causas exactas aún se investigan. Las interferencias tecnológicas, atribuidas a tensiones geopolíticas en la región, elevan los riesgos en una zona clave para el comercio global.
El estrecho de Ormuz, controlado por Irán, es vital para las exportaciones de países como Emiratos Árabes Unidos y Qatar. Analistas advierten que un bloqueo prolongado podría disparar los precios del petróleo y afectar la economía mundial. La comunidad internacional urge a Irán a garantizar la seguridad marítima, mientras Francia y otras potencias navales refuerzan su vigilancia en la región para mitigar los riesgos.





