En una rueda de prensa llevada a cabo el jueves, Wang Wenbin, portavoz del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, acusó a Estados Unidos de intentar imponer sus propias reglas al mundo, presentándolas como normas internacionales, a pesar de violar los estatutos del derecho internacional. Estas declaraciones surgieron en respuesta a la intención del Grupo de los 7 (G7) de exigir a China que actúe con mayor responsabilidad.
Wang Wenbin afirmó que cuando el G7 habla de reglas internacionales, en realidad se refiere a reglas occidentales que se basan en ideologías y valores propios, en lugar de representar los intereses comunes de la comunidad internacional. Según el vocero chino, estas reglas benefician solo a unos pocos países, incluyendo a Estados Unidos y los miembros del G7.
Las críticas de Wang se produjeron después de que se revelara que Washington y sus aliados planeaban aprovechar la próxima cumbre del G7 para solicitar a China que actúe de manera responsable en relación con Taiwán y su relación con Moscú, según informó la agencia japonesa Nikkei la semana pasada.
El portavoz chino también condenó tanto al G7 en su conjunto como a Estados Unidos específicamente por violar y alterar constantemente las normas internacionales. Wang recordó que en los últimos años, Estados Unidos ha abandonado 17 organizaciones y tratados internacionales, lo cual ha generado preocupación en la comunidad internacional.
En este sentido, Wang destacó las recientes revelaciones sobre el espionaje indiscriminado llevado a cabo por Estados Unidos hacia otros Estados, incluidos sus aliados en el G7. Asimismo, mencionó la presión diplomática ejercida por Washington, que ha recurrido a la coerción económica y la injerencia militar en otras naciones.
El vocero chino también señaló que Estados Unidos ha invadido de manera descarada países como Afganistán, Irak y Siria, así como otros países más pequeños y débiles, causando la muerte y desplazamiento de millones de civiles inocentes. Wang concluyó afirmando que, cuando se trata de normas internacionales, Estados Unidos debería ser considerado como un país cuestionable y no tiene la autoridad moral para señalar a otros países.
Estas declaraciones reflejan las crecientes tensiones entre China y Estados Unidos, así como el esfuerzo por parte de China de cuestionar la influencia y el liderazgo de Estados Unidos en el ámbito internacional, particularmente en relación con las normas y reglas internacionales. La postura de China resalta el debate sobre el papel y la legitimidad de las reglas establecidas por las potencias occidentales en el escenario mundial.