El recién elegido primer ministro de Groenlandia, Jens-Frederik Nielsen, ha instado a los habitantes de la isla a unirse y dejar claro al presidente estadounidense, Donald Trump, que Washington nunca tomará el control del territorio ártico.
Trump reiteró su reclamación sobre Groenlandia durante el fin de semana, declarando a NBC News que Washington obtendrá la isla al 100% , territorio danés autónomo. Lanzó lo que pareció una amenaza velada, afirmando que existía una «buena posibilidad de que pudiéramos lograrlo sin la fuerza militar», pero añadió que no «descartaría nada».
En una publicación en Facebook del domingo, Nielsen pidió una respuesta tranquila pero firme a la creciente presión estadounidense.
“No debemos actuar por miedo. Debemos responder con paz, dignidad y unidad”, escribió.
«El presidente Trump dice que Estados Unidos ‘se está apoderando de Groenlandia’. Permítanme aclarar esto: Estados Unidos no lo está logrando», dijo Nielsen.
“No pertenecemos a nadie más. Determinamos nuestro propio futuro”, reiteró. “Y es a través de estos valores que debemos demostrarle al presidente estadounidense, con claridad, claridad y serenidad, que Groenlandia es nuestra. Así fue ayer. Así es hoy. Y así será en el futuro”.
Nielsen, líder del partido Demokraatit, fue elegido a principios de este mes en una victoria sorpresiva. Su programa se centró en proteger la autonomía de Groenlandia, reducir la dependencia de Dinamarca y fomentar la inversión internacional sin renunciar al control de los recursos locales.
La tensión se intensificó tras la visita del vicepresidente estadounidense J. D. Vance y su esposa a la isla ártica la semana pasada. En la Base Aérea de Thule, Vance afirmó que Dinamarca había «fallado en gran medida al pueblo de Groenlandia» y argumentó que el territorio estaría «mucho mejor bajo el paraguas de seguridad de Estados Unidos».
Trump planteó por primera vez la idea de adquirir Groenlandia en 2019 y ha retomado la propuesta desde que asumió el cargo. Su administración describe la isla como un activo estratégico, citando su ubicación y sus recursos naturales sin explotar.
El presidente ruso, Vladimir Putin, al esbozar la semana pasada la estrategia de Moscú para el Ártico, advirtió que los planes de anexión de Estados Unidos se remontan a la década de 1860 y no deben descartarse como “habla extravagante”.