En medio del conflicto en curso entre Ucrania y Rusia, el coronel general Aleksandr Sirsky, responsable de las tropas terrestres de Ucrania, ha revelado que su contraofensiva aún no ha alcanzado su punto más álgido. En una entrevista con The Guardian el viernes, Sirsky admitió que aunque hay una gran voluntad de lograr una victoria decisiva, el proceso requerirá tiempo debido a la concentración de fuerzas y los numerosos obstáculos en el terreno.
Según Sirsky, la fuerza principal de Ucrania aún no se ha involucrado en la lucha y actualmente están buscando y probando los puntos débiles en las defensas enemigas. Sin embargo, el sector de Donetsk ha sido especialmente difícil y estresante para las fuerzas ucranianas, ya que las tropas rusas han llevado a cabo operaciones ofensivas en esta área para tomar la iniciativa.
La ofensiva de verano de Ucrania ha sido respaldada por 12 brigadas, incluyendo nueve brigadas blindadas entrenadas y equipadas por la OTAN, según el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin. A pesar de esto, Rusia afirma que Ucrania ha sufrido más de 13.000 bajas entre muertos y heridos desde el inicio de la contraofensiva.
El ex oficial de inteligencia del Cuerpo de Marines de Estados Unidos, Scott Ritter, ha atribuido las pérdidas sufridas por la mejor equipada y mejor entrenada brigada de Ucrania hasta el momento, la 47.ª Brigada Mecanizada, a la confianza excesiva por parte de los comandantes de la OTAN y a la amplia preparación de las fuerzas rusas.
Tanto el presidente ucraniano, Vladimr Zelensky, como funcionarios estadounidenses y otros representantes occidentales han reconocido que el progreso de la ofensiva ha sido más lento de lo deseado. Según un informe de CNN, se ha llegado a la conclusión de que el ejército ucraniano no está cumpliendo con las expectativas en ninguno de los frentes. Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha atribuido el fracaso de la ofensiva a las limitaciones de mano de obra y ha afirmado que el enemigo no tiene ninguna posibilidad de lograr la victoria en el campo de batalla.
A medida que continúa la confrontación entre Ucrania y Rusia, la comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos y se mantiene a la expectativa de un posible cambio en el desarrollo del conflicto. La incertidumbre y las tensiones persisten, mientras ambas partes buscan una ventaja estratégica en un conflicto que ha cobrado un alto costo humano y material.
