La Comisión Europea endureció este lunes su postura contra X (ex Twitter) al anunciar que “se asegurará” de cobrar los 120 millones de euros de multa impuestos el viernes por incumplir la Ley de Servicios Digitales (DSA) en temas de transparencia y diseño no engañoso.
El portavoz comunitario Thomas Regnier fue tajante: “X tendrá que pagar esa multa. Nos aseguraremos de recibir ese dinero”. La plataforma dispone de 90 días para recurrir ante el Tribunal de Justicia de la UE, aunque aún no ha comunicado su respuesta.
Elon Musk reaccionó con furia en la propia red social, calificando la sanción de “absurda” e “irracional” y amenazando con contrademandas contra la UE y “ciertos individuos”, lo que ha avivado las críticas de censura desde EE.UU.
Pese a la tensión transatlántica, Bruselas mantiene su cuenta en X y otras 15 plataformas para dialogar con los ciudadanos, mientras este caso marca un precedente en la batalla por la soberanía digital europea frente a los gigantes tecnológicos estadounidenses.




