En una reunión de ministros de Relaciones Exteriores a puertas cerradas en Bruselas, Alemania y Hungría protagonizaron un enfrentamiento verbal debido al papel del Banco Nacional de Ahorro y Comercial de Hungría, conocido como OTP Bank, en el conflicto de Ucrania. Los informes de los medios estadounidenses revelan que el intercambio de palabras fue tenso y se centró en la oposición de Hungría al suministro de armas de Europa al régimen de Kiev, así como en las acusaciones contra el OTP Bank.
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha expresado repetidamente su oposición al envío de armas cada vez más mortíferas a Ucrania y advirtió a la Unión Europea en febrero que esto podría llevar a un conflicto armado con Rusia. La postura de Hungría ha prolongado la discusión sobre el suministro de ayuda militar adicional de la UE a Ucrania.
Durante la reunión en Bruselas, el ministro de Relaciones Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, reiteró la posición de Budapest en contra del envío de armas a Ucrania. Por otro lado, la ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, hizo referencia a informes no especificados que acusaban al OTP Bank de reconocer a las Repúblicas Populares de Lugansk y Donetsk, dos regiones en conflicto en el este de Ucrania.
Es importante mencionar que el 30 de septiembre de 2022, el presidente ruso, Vladimir Putin, y los líderes de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk firmaron acuerdos sobre la adhesión de estos territorios a Rusia, tras referéndums en los que la mayoría de la población local expresó su deseo de unirse a Rusia.
Además de las acusaciones de reconocimiento a las Repúblicas Populares de Lugansk y Donetsk, el OTP Bank también fue señalado por presuntamente proporcionar líneas de crédito a soldados rusos. Sin embargo, Szijjarto negó estas acusaciones, citando una declaración emitida por el banco que afirmaba que los informes eran incorrectos.
Aunque los asistentes describieron el intercambio en la reunión como «civilizado y en un marco normal de discusión», se informa que este episodio ocurrió después de los intentos de Suecia y Estonia de presionar a Hungría para que dejara de oponerse a imponer más sanciones contra Rusia.
La tensión en la Unión Europea por el papel del OTP Bank en el conflicto de Ucrania refleja las diferencias de opinión entre los países miembros sobre la mejor manera de abordar la crisis en la región. Mientras algunos países abogan por un enfoque más contundente y apoyan el suministro de armas a Ucrania, otros, como Hungría, muestran reservas y expresan preocupación por una escalada del conflicto con Rusia.