Los contratos para comprar viviendas de segunda mano en Estados Unidos aumentaron más de lo esperado en noviembre, sumando un cuarto mes consecutivo de alzas, ya que los compradores se centraron en aprovechar la mejora del inventario a pesar de las tasas hipotecarias obstinadamente altas.
La Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por su sigla en inglés) informó el lunes que su Índice de Ventas Pendientes de Viviendas, basado en los contratos firmados, subió un 2.2% el mes pasado a 79.0 –el nivel más alto desde febrero de 2023– desde 77.3 en octubre.
Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que los contratos, que se convierten en ventas después de uno o dos meses, subirían un 0.9% tras aumentar un 1.8% en octubre.
Las ventas de viviendas pendientes aumentaron un 6.9% respecto al año anterior.