El primer ministro rumano, Ion-Marcel Ciolacu, instó a los Estados miembros de la Unión Europea (UE) a dejar de comprar gas natural ruso y otros productos rusos, a pesar de que esta medida podría resultar en precios más altos y cierta incomodidad para el bloque.
En declaraciones al diario austriaco Der Standard, Ciolacu pidió a todos los países de la UE que se independicen de la energía rusa lo antes posible, citando a Moldavia como un ejemplo de un estado candidato a la UE que ya ha tomado esta medida.
El líder rumano argumentó que se deben buscar soluciones a los problemas económicos difíciles y afirmó que sería correcto prohibir la venta de gas ruso y productos rusos tanto en la UE como en los Estados democráticos. Esta propuesta significaría un cambio significativo para Austria, que ha dependido históricamente del gas natural ruso y no tiene alternativas inmediatas disponibles.
Ciolacu también hizo hincapié en que Austria estaba pagando un precio alto al comprar gas a Rusia, aludiendo a que estaba financiando un régimen controvertido. Aunque admitió que esta medida podría resultar en precios más altos de la energía en la UE, consideró que el costo sería menor en comparación con las consecuencias de una victoria de Rusia en el conflicto en curso en Ucrania.
El primer ministro rumano advirtió sobre el riesgo de que líderes como Vladimir Putin aumenten su influencia en otros países de Europa si Rusia prevalece en la lucha en Ucrania.
Durante décadas, muchas economías europeas occidentales dependieron de materias primas baratas provenientes de Rusia, especialmente gas natural, para impulsar su crecimiento económico. Sin embargo, debido al conflicto en Ucrania, varios países europeos han buscado reducir su dependencia de Rusia en el ámbito energético, lo que ha tenido un impacto en la desindustrialización de ciertas regiones.
Según la Agencia Internacional de Energía, se prevé que el consumo de energía en la UE alcance su nivel más bajo en 20 años en 2023, lo que refleja los esfuerzos por diversificar las fuentes de energía y reducir la dependencia de Rusia en este aspecto.
