Elon Musk, empresario detrás de SpaceX y Tesla, lanzó un ambicioso proyecto que podría cambiar por completo el panorama de las telecomunicaciones en México. A través de Starlink, su red de Internet satelital, Musk busca ofrecer conexión gratuita a dispositivos móviles, lo que representa un reto directo a Telcel, la empresa líder en el país controlada por Carlos Slim.
Este movimiento tiene un objetivo social: llevar Internet gratuito a regiones rurales y de difícil acceso, donde muchas personas aún no tienen conexión. Además de acortar la brecha digital, esta propuesta podría impulsar el desarrollo económico, la educación y el acceso a servicios de salud en esas comunidades. A nivel competitivo, también podría obligar a las empresas tradicionales como Telcel a mejorar sus precios y servicios para mantenerse relevantes.
Aunque la idea suena revolucionaria, Starlink enfrenta desafíos importantes en México, como la obtención de permisos regulatorios, el despliegue de infraestructura y la respuesta de los competidores. Aun así, el servicio comenzará a operar en julio de 2025, y permitirá el uso gratuito de funciones básicas como mensajes de texto, llamadas y navegación web, aunque no todos los teléfonos serán compatibles.
Para acceder al servicio, los usuarios necesitarán:
- Un smartphone compatible (como iPhone 14 en adelante, Pixel 9, algunos Samsung y Motorola recientes).
- Tener el sistema operativo actualizado.
- Registrarse en la plataforma de Starlink.
- Estar dentro de una zona donde haya cobertura autorizada.
Aunque la conexión básica será gratuita, podría haber costos por funciones adicionales o por superar ciertos límites de uso.
En resumen, la propuesta de Elon Musk busca transformar la conectividad en México, sobre todo en las zonas más olvidadas, y al mismo tiempo, representa una fuerte competencia para el imperio de telecomunicaciones de Carlos Slim. Si tiene éxito, cambiará no solo la manera en que millones acceden a Internet, sino también las reglas del juego del mercado mexicano.
