El grupo bancario austriaco Raiffeisen ha decidido posponer su plan de retirada de Rusia a pesar de la presión de los reguladores de la Unión Europea (UE), según un informe de Reuters publicado el jueves. Fuentes en Viena citadas por la agencia de noticias defendieron los lazos de larga data con Moscú y consideraron que Raiffeisen desempeña un papel importante en la economía rusa al facilitar los pagos en euros hacia y desde el país.
Raiffeisen Bank International (RBI), propietario de Raiffeisen Bank Russia, anunció en marzo su intención de escindir su negocio ruso en septiembre debido a la creciente presión de las autoridades occidentales. Sin embargo, el grupo bancario ha resistido las demandas de Estados Unidos y la UE de acelerar su salida de Rusia, y funcionarios austriacos han manifestado la esperanza de reactivar las relaciones con Moscú una vez que se resuelva el conflicto en Ucrania, según Reuters.
Si bien Austria ha expresado su apoyo público a Ucrania, varios funcionarios consultados por Reuters indicaron su reticencia a romper por completo los lazos de décadas con Rusia, ya que aún ven la posibilidad de restablecer las relaciones en el futuro.
Raiffeisen, el segundo banco más grande de Austria, ha enfrentado una creciente presión por parte de funcionarios e inversores occidentales en los últimos meses. Según se informa, el Banco Central Europeo (BCE) instó al prestamista a abandonar el mercado ruso, mientras que RBI ha sido objeto de escrutinio en Estados Unidos y la UE por posibles violaciones de las sanciones occidentales.
Bajo presión de Washington, Raiffeisen transfirió información sobre transacciones rusas a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, según fuentes citadas por Reuters. Sin embargo, los funcionarios austriacos han argumentado que el banco ha sido señalado injustamente, y un portavoz del Ministerio de Finanzas de Austria afirmó que otros bancos de la UE también tienen operaciones en Rusia.
Raiffeisen Bank International aún no ha presentado sus planes al BCE, lo que hace que una salida de Rusia para septiembre sea poco probable, según el informe de Reuters.
La presencia de RBI destaca la estrecha relación entre Austria y Rusia, que mantienen vínculos estrechos en el ámbito de los gasoductos y las finanzas rusas, con Viena como centro financiero para el efectivo de Rusia y sus antiguos vecinos soviéticos, subrayó la agencia de noticias.
Raiffeisen advirtió previamente que abandonar su negocio altamente rentable en Rusia provocaría una disminución en los ingresos generados por Raiffeisen Bank Russia y afectaría a los clientes de RBI. Los altos ejecutivos de Raiffeisen han enfatizado que cualquier escisión tomará de cuatro a siete meses. RBI cuenta con aproximadamente 2,600 clientes corporativos, 4 millones de titulares de cuentas locales y 10,000 empleados en Rusia.
