El gobierno federal volvió a descalificar el reportaje de The New York Times que documenta la producción de fentanilo en México y revela que grupos criminales pagan a personas para probar la droga. En respuesta, el diario estadounidense reiteró la validez de su investigación.
Durante la conferencia presidencial, Juana Peñaloza Ibarra, química analista de la Secretaría de Marina, señaló que tras analizar el contenido del artículo titulado “Así es un laboratorio de fentanilo del Cártel de Sinaloa”, publicado el 29 de diciembre, no se encontraron «elementos suficientes» que demuestren la existencia de un laboratorio de síntesis de clorhidrato de fentanilo en el contexto presentado por el medio.
Peñaloza también cuestionó la narrativa de los supuestos “cocineros” entrevistados, quienes mencionaron que el Ejército mexicano desmanteló una casa de seguridad horas antes de grabar los videos, obligándolos a cambiar de ubicación rápidamente. Según la analista, esta afirmación no coincide con las dinámicas criminales usualmente observadas.
Respuesta del Times
El Times defendió la integridad de su reportaje, subrayando que sus periodistas llevaron a cabo la investigación con gran riesgo personal y documentaron las operaciones de producción ilícita de fentanilo en condiciones improvisadas.
“Seguimos respaldando todos los aspectos de nuestros informes sobre la producción de fentanilo en México. La síntesis de fentanilo ilícito en condiciones similares a las documentadas está ampliamente comprobada”, afirmó el medio en un comunicado.
Este cruce de declaraciones subraya la controversia en torno a la capacidad de las autoridades para abordar el fenómeno del tráfico y producción de fentanilo en el país, un problema que ha escalado a nivel internacional.