El ex presidente Felipe Calderón ha vuelto a arremeter contra la dirigencia de su antiguo partido, el Acción Nacional (PAN), a raíz de la afiliación de Fausto Barajas, su ex subsecretario de Infraestructura, a las filas del Movimiento Ciudadano (MC). El anuncio de la adhesión de Barajas, compartido por el diputado emecista Salomón Chertorivski, se hizo público el pasado 6 de mayo.
A pesar de felicitar a Barajas por su nombramiento como Secretario de Movimientos Sociales para la bancada naranja, Calderón lamentó que se hubiera unido al MC y culpó a la dirigencia del PAN por ello, a la que acusó de actuar por avaricia y estupidez. También exhortó a la bancada a «sacar pronto de ahí al camaleón de la política que tanto daño ha hecho».
Por su parte, Barajas agradeció al partido de Dante Delgado por la apertura, el diálogo y la escucha, y compartió la visión de construir una vía para la nueva política en México.
Esta nueva arremetida del ex presidente Calderón se suma a las ya conocidas críticas que ha lanzado en el pasado contra la dirigencia del PAN, lo que pone de manifiesto las divisiones internas y la falta de unidad que existe en el partido. La afiliación de Barajas al MC puede ser vista como un indicio de la creciente popularidad de este partido, que podría ser un actor importante en las elecciones presidenciales del 2024.
Cabe destacar que las críticas de Calderón no solo se han centrado en la dirigencia del PAN, sino también en el actual gobierno encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador. El ex presidente ha sido un crítico feroz de la gestión del gobierno y ha denunciado la supuesta falta de acción en temas como la seguridad y la economía.
Además, la afiliación de Barajas al MC podría tener un impacto en la política estatal de Jalisco, donde el partido naranja tiene una fuerte presencia. De hecho, algunos analistas políticos señalan que la incorporación de Barajas podría ser vista como un movimiento estratégico del MC para fortalecer su posición en el estado.
En cualquier caso, la arremetida de Calderón contra la dirigencia del PAN y su apoyo al MC ponen de manifiesto las tensiones y divisiones que existen en la política mexicana, y sugieren que las elecciones presidenciales del 2024 podrían ser particularmente disputadas e impredecibles.