La presidenta Claudia Sheinbaum llamó a los congresos estatales a analizar con cuidado las iniciativas conocidas como “Ley Esposa”, al advertir que no necesariamente tienen como objetivo central la paridad de género en política, sino que podrían responder a otros intereses.
Al referirse a las propuestas presentadas en entidades como San Luis Potosí y Nuevo León —que plantean que sólo mujeres puedan competir por la gubernatura en 2027—, la mandataria subrayó que el punto clave es determinar si dichas normas son jurídicamente procedentes.
Sheinbaum recordó que el Instituto Nacional Electoral ya estableció reglas de paridad para las candidaturas a gubernaturas, al definir que, de las 17 entidades que renovarán titular del Ejecutivo estatal en 2027, los partidos deberán postular mujeres en al menos nueve y hombres en las otras ocho.
Destacó que este esquema ya ha contribuido a incrementar el número de mujeres gobernadoras en el país, por lo que consideró necesario evaluar si medidas adicionales, como la alternancia obligatoria entre mujer y hombre en cada proceso electoral, realmente fortalecen la equidad de género.
La presidenta señaló que este tipo de disposiciones tienen ventajas y desventajas, ya que en algunos casos podrían no estar orientadas genuinamente a promover la participación política de las mujeres, sino a beneficiar intereses particulares.
Por ello, recomendó a los congresos estatales abrir el debate y revisar a fondo la viabilidad legal de estas iniciativas, más allá de posibles impugnaciones partidistas. Indicó que se solicitó un análisis jurídico para determinar si este tipo de leyes se apegan al marco constitucional vigente.
Sheinbaum enfatizó que la discusión debe centrarse en garantizar la paridad sustantiva y no en fórmulas que, aunque aparenten favorecer a las mujeres, no necesariamente cumplen ese objetivo.




