El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva destinada a reforzar el liderazgo del país en el desarrollo, comercialización y exportación de drones, en un esfuerzo por fortalecer la industria nacional y la seguridad. La medida, anunciada desde la Casa Blanca, busca posicionar a EE.UU. como referente global en tecnología de sistemas no tripulados.
La orden instruye a las agencias federales a priorizar la innovación en drones, facilitando la investigación y el desarrollo de nuevas aplicaciones civiles y militares. También promueve la agilización de procesos para exportar estas tecnologías a aliados, con el objetivo de contrarrestar la influencia de competidores como China en el mercado global.
Trump destacó que los drones son clave para la economía y la defensa, afirmando: “Aseguraremos que Estados Unidos lidere esta industria vital, generando empleos y protegiendo nuestros intereses”. El decreto incluye medidas para reducir regulaciones que obstaculicen a los fabricantes y fomentar la colaboración entre el gobierno y el sector privado.
Expertos ven esta iniciativa como un paso estratégico, aunque algunos advierten sobre la necesidad de equilibrar la seguridad con la privacidad. La orden entra en vigor de inmediato, marcando un hito en la política tecnológica de la administración.
