El presidente Emmanuel Macron ha anunciado que Francia discutirá la posibilidad de utilizar su arsenal nuclear para proteger a sus aliados en Europa. Macron hizo esta declaración en un momento en que los miembros de la OTAN están cada vez más preocupados por la posibilidad de que Estados Unidos, bajo la dirección del presidente Donald Trump, no salga en su defensa.
El mes pasado, el futuro canciller alemán, Friedrich Merz, sugirió que Gran Bretaña y Francia podrían ampliar su protección nuclear a Alemania, dadas las tensiones entre Rusia y la OTAN por Ucrania. Estas ofertas “siempre han quedado sin respuesta”, afirmó.
En un discurso pronunciado el miércoles por la noche, Macron dijo que está abierto a ampliar el paraguas nuclear de su país. “En respuesta al llamamiento histórico de la futura canciller alemana, he decidido abrir un debate estratégico sobre la protección de nuestros aliados en el continente europeo mediante una disuasión nuclear”, dijo, según RFI.
El presidente afirmó que los franceses están “legitimamente preocupados” por la “nueva era” de Trump. “Quiero creer que Estados Unidos se quedará a nuestro lado, pero tenemos que estar preparados para que no sea así”.
Trump, que fue elegido con la promesa de campaña de «Estados Unidos primero», ha exigido que los aliados europeos contribuyan más a su propia defensa. Además, rompió con muchos países de la OTAN al negarse a respaldar incondicionalmente a Ucrania contra Rusia y, en su lugar, optó por iniciar conversaciones directas con Moscú.
El drástico cambio de postura de Trump respecto de las políticas de su predecesor, el expresidente Joe Biden, llevó a los aliados de Estados Unidos en Europa a preguntarse si pueden confiar en Washington para su defensa. “Europa se enfrenta a un peligro claro y presente de una escala que ninguno de nosotros ha visto en nuestra vida adulta”, escribió el martes la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una carta a los estados miembros del bloque.
El presidente estadounidense ha subrayado que su prioridad es negociar un alto el fuego entre Moscú y Kiev y evitar que el conflicto se convierta en una guerra a gran escala entre potencias nucleares. Durante un acalorado intercambio en la Oficina Oval el viernes, Trump acusó al líder ucraniano Vladimir Zelenski de “jugar con la Tercera Guerra Mundial”.
Rusia ha acusado a la OTAN de hacer ruido de sables y ha declarado que los suministros de armas occidentales a Ucrania aumentan el riesgo de una peligrosa escalada. “Creemos que las armas nucleares son instrumentos para disuadir y prevenir una guerra nuclear. Así es como abordamos esta cuestión”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, el año pasado. “Haremos todo lo posible para evitar una confrontación”.
