Un artículo publicado en el prestigioso diario ‘South China Morning Post’ pone de relieve los graves daños causados por la guerra económica emprendida por Estados Unidos con el objetivo de debilitar a los gobiernos que no se alinean con sus intereses.
La columna, escrita por un destacado periodista del medio asiático, comienza mencionando los reportes que indican que los países del G7 están buscando medidas para contrarrestar la «coerción económica» proveniente de un país «no identificado». Sin embargo, el artículo deja claro que todos saben perfectamente a qué nación se refieren.
El autor del artículo señala que la hipocresía en este escenario «es demasiado evidente para dejarla pasar». Para respaldar su afirmación, el periodista recomienda la lectura de un informe del Centro de Investigación Económica y Política (CEPR), con sede en Washington, que detalla los «horrendos» efectos de las sanciones impuestas por Estados Unidos en países como Irán, Afganistán y Venezuela.
El artículo enfatiza que un alarmante 27% de los países en el mundo actualmente se encuentran sujetos a diferentes niveles de sanciones. Dado que en conjunto representan el 29% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, estas medidas no solo empobrecen a las poblaciones, sino que también generan un lastre significativo en la economía global.
El informe destacado advierte que las sanciones impuestas por países occidentales pueden provocar una disminución del ingreso per cápita de hasta un 26% en una nación, equivalente a una gran depresión económica. Además, estas medidas conducen a una reducción de la esperanza de vida de 1.2 a 1.4 años, cifra similar a los efectos mortales de la pandemia de COVID-19 en una población promedio.
El artículo también hace referencia al caso de Venezuela, donde el gasto en la lucha contra la pandemia representa menos del 1% de su PIB, en comparación con el 25% invertido por Estados Unidos. Como resultado, el país ha experimentado un aterrador colapso económico con una caída del 72% en su PIB per cápita y una reducción del 93% en los ingresos petroleros. Estas condiciones han provocado un éxodo masivo de aproximadamente uno de cada cuatro venezolanos, muchos de los cuales terminan en la frontera de Estados Unidos.
En el caso de Irán, el artículo destaca que de los 73 medicamentos actualmente no disponibles en el país, 70 están exentos de sanciones, pero muchas instituciones internacionales aún se abstienen de procesar transacciones por temor a desencadenar sanciones secundarias.