La industria mueblera de México, Estados Unidos y Canadá debe unificar esfuerzos bajo el T-MEC para contrarrestar la competencia de mercados asiáticos y europeos, señaló la Asociación de Fabricantes de Muebles de Jalisco (AFAMJAL). En el marco de la Expo Mueble Internacional Invierno 2025, celebrada en Guadalajara, expertos destacaron que la integración regional es crucial para fortalecer un sector que aporta 1.2% al PIB manufacturero mexicano y genera más de 200 mil empleos directos, en un contexto de crecientes aranceles y volatilidad comercial global.
El evento, que atrajo a 300 expositores y proyecta cerrar con 20 mil compradores mayoristas, subraya la importancia de la colaboración trilateral. México exporta anualmente muebles por 2,500 millones de dólares a EE.UU., representando el 80% de sus ventas externas, pero enfrenta desafíos por los costos logísticos y la competencia de China, que domina el 40% del mercado global de muebles, valuado en 700 mil millones de dólares. Ana Cecilia Ramos, presidenta de AFAMJAL, afirmó: “El T-MEC nos da una ventaja competitiva, pero necesitamos estrategias conjuntas en diseño, producción y distribución para enfrentar a potencias como Asia y Europa, que están ganando terreno con precios bajos y tecnología avanzada”.
Desde una perspectiva económica, la unidad en el T-MEC podría incrementar las exportaciones regionales en un 15% para 2027, según proyecciones del Consejo Coordinador Empresarial (CCE). La industria mexicana, concentrada en Jalisco, se beneficia del nearshoring, con empresas reubicando operaciones desde Asia para aprovechar la cercanía con EE.UU. Sin embargo, los aranceles impuestos por la administración Trump a insumos clave, como madera y textiles, han elevado costos de producción en un 10%, afectando márgenes y competitividad. Además, la inflación global, estimada en 4.5%, encarece materias primas, lo que podría reducir la demanda en mercados clave.
La expo destacó innovaciones en diseño sostenible y tecnología, como muebles modulares y procesos de fabricación digital, que podrían captar mayor cuota en el mercado estadounidense, donde el gasto en muebles creció un 3% en 2024. No obstante, el CCE advierte que sin políticas fiscales que incentiven la inversión en maquinaria y capacitación, México podría perder hasta 500 millones de dólares en exportaciones anuales frente a competidores asiáticos.Para contrarrestar estos retos, AFAMJAL propone un plan regional que incluye armonización de estándares de calidad, reducción de barreras logísticas y promoción de ferias trilaterales.
Esta estrategia no solo fortalecería el empleo, sino que consolidaría al T-MEC como un bloque competitivo frente a la Unión Europea y China. México, con su mano de obra calificada y costos competitivos, está posicionado para liderar, pero urge acción coordinada antes de la revisión del T-MEC en 2026.
La integración de la industria mueblera bajo el T-MEC es una oportunidad para impulsar el crecimiento económico y el empleo, pero requiere superar barreras comerciales y alinear estrategias para mantener la competitividad global. El sector, pilar del nearshoring, podría inyectar dinamismo a la economía regional si se actúa con visión conjunta.